El
pasado viernes 10 de abril la Sala de Exposiciones Mauro Muriedas de
Torrelavega acogió la presentación de la última novela del escritor cántabro
Mariano F. Urresti. La obra, titulada Agatha
escribía con sangre, ha sido publicada por la editorial Suma de Letras, del
grupo RandomHouseMondadori, con la que el autor ha publicado sus dos anteriores
trabajos, La tumba de Verne y Las violetas del círculo Sherlock.
El
acto dio comienzo a las 20.00 horas, y tuvo como maestro de ceremonias al
periodista y escritor jienense, director de la revista ENIGMAS, Lorenzo
Fernández Bueno, que empezó explicando “lo que me ha traído hasta aquí, más
allá de la amable invitación del autor de este libro”. En primer lugar,
aseguró, que “siempre es motivo de celebración el nacimiento de un nuevo hijo
literario, al que hoy estamos rindiendo homenaje en la casa en la que ha venido
al mundo”. Y en segundo lugar, afirmó que “en este mundo del periodismo en el
que a veces nos rodean enjambres de moscas que dicen palabras bonitas y nos
halagan, todavía queda gente auténtica con la que se puede contar sin pedir más
que amistad, como el autor de Agatha
escribía con sangre”.
Durante
veinte minutos hizo un repaso de la amistad que une a ambos escritores, de la
manera que tiene Mariano F. Urresti de trabajar, e incidió en la capacidad del
autor cántabro para crear con maestría sus propios mundos, para soñar, y para
hacer soñar al lector.
Llegó
el turno del autor de la nueva novela, que desde el primer momento advirtió que
no pensaba hablar de ésta, sino de aquélla que vertebra la trama de la obra:
Agatha Christie. De este modo, Mariano F. Urresti habló de uno de los episodios
más enigmáticos de la vida de la escritora: su desaparición en diciembre de 1926,
por un periodo de once días, durante los cuales no se supo nada de la “dama del
crimen”: “Incluso el mismísimo
ConanDoyle ayudó en la búsqueda, entregando a un médium un guante de Agatha. Y
el médium aseguró que se encontraba cerca de un gran estanque de agua”. 
Llama
la atención el hecho de que cuando finalmente apareció se encontraba en un
hotel, inscrita con un nombre falso y caracterizada para no ser reconocida. Junto
al establecimiento, había un estanque artificial.
Nunca
se supo qué ocurrió durante esas jornadas, y ese es el argumento que utiliza
Urresti para iniciar una trama que ya le está generando un aluvión de buenas
críticas, y que está destinada a convertirse en un bestseller.
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